Hacer dejar de llorar a un bebé puede ser fácil cuando se toman en cuenta algunos criterios de compresión de éstos. No desesperes más y pienses que el llanto interminable de tu hijo despierto en la madrugada no tiene remedio. Te pasamos algunos tips esenciales que te ayudarán enormemente en tu odisea cotidiana calmando a tu bebé y durmiéndolo.
Pasea a tu bebé: si paseas a tu bebé en su cochecito o un asiento especial de tu auto, esto hará que tu hijo gaste considerable energía al mantener la atención durante todo el trayecto y llegue a casa sintiéndose casado; así será más fácil que duerma rápido y profundamente. El mismo vaivén de los vehículos puede producirles un efecto somnífero.
Da un suave masaje al bebé. Esto tiene un efecto calmante sobre sus músculos. Apóyate de un aceite especial o térmico para bebé que le causará una sensación placentera y lo liberará de su tensión. Esto le hará dormir mejor.
Camina balanceando al bebé: esto produce un efecto calmante en los dos. La tranquilidad lograda en el cuerpo del padre o la madre por el balanceo es capaz de trasmitirse también al bebé. Un baile lento y acompasado tiene un efecto aún más positivo.
Envuelve a tu bebe tras darle un baño. Los padres suelen sorprenderse de cómo un bebe se calma luego de ser envuelto ceñidamente con una frazada no dejando que sus miembros se muevan. Incluso si el bebe no se baña, los resultados son generalmente muy positivos.
Cero ruido y luces. Éstos son distractores para los bebés que quieren dormir pero no pueden hacerlo. Apaga la tele. Déjalo solo si es necesario, con el fin de que pueda concentrarse en su proceso de lograr el sueño.
Pide ayuda de un familiar o amigo si necesitas descansar tú y por tu estrés no pues hacerte cargo del niño. De lo contrario transmitirás tu estrés al bebé y las cosas pueden complicarse.
Cubre sus ojos con un paño. Este es un remedio que resulta casi milagroso. Al cerrarse sus ojos, su mente se induce casi automáticamente al sueño, ¡pues los bebés no tienen cosas en qué pensar!